3 Septiembre 2017
¿De verdad, una ducha fría? No te preocupes, no es necesario que esté “realmente fría”, pero si al menos tibia, lo suficiente para que te produzca una sensación de frescura. ¿Y por qué ? Te preguntarás. Porque es un modo magnífico de empezar el día. El agua fría reactiva nuestra circulación, tonifica nuestra piel, estimula nuestro sistema inmunológico, resuelve el dolor de piernas, reactiva la circulación en las varices y mejora la elasticidad de nuestra piel.